Ahí está, se va apoderando de tí, de tus ganas, va reduciendo tus impulsos y consigue que tu garganta articule un jodido "no puedo, soy incapaz de hacerlo". ¿Su nombre? Límite, barrera mental, comida de coco. 
Porque, somos dueños de nuestro futuro y de nuestra vida, y en nuestras manos está conseguir lo que nos proponemos o quedarnos siendo personas del montón que se conforman con el suficiente y dicen "no puedo" antes de dar las buenas tardes. 
Que sí, que te digo yo que se puede, que dos y dos son cuatro hasta que tu decides y luchas porque sean cinco. Que no siempre llueve a gusto de todos pero nadie mueve un sólo dedo para remediarlo. 
Que el "no puedo" es el estupendo escudo de los cobardes y yo de cobarde tengo poco. 
Que está en tus manos cambiar las cosas, luchar batallar, sacar uñas y dientes, y puede que pierdas, pero el " no puedo" no ha sido ninguna clase de impedimento.
El "no puedo" es para personas orgullosas, que prefieren quedar bien formulando las dos puñeteras palabras que ver su orgullo por los suelos por intentar alcanzar sus metas. 
Y es que, querido amigo, tu único limite, eres tú!